Agua caliente sanitaria / Calefacción
Agua caliente sanitaria / Calefacción
Se conoce como agua caliente sanitaria (ACS) a los sistemas para producir agua caliente destinada al consumo humano. Normalmente, el agua que se emplea para este servicio procede de la red de suministro, es potable y se usa en duchas, bañeras, grifos, lavabos, cocinas y cualquier punto donde sea necesario disponer de agua caliente.
¿Qué vamos a ver en este post?
Los tipos de sistemas de producción de ACS más comunes son:
Calientan el agua en el mismo momento en que se demanda. Existen diversos aparatos con la capacidad de proporcionar agua caliente de forma instantánea, siendo los más comunes: calentadores eléctricos o de gas, calderas mixtas de calefacción y agua caliente. Estos aparatos tienen la ventaja de que su consumo de energía es moderado, aunque también presentan algunas desventajas: mayor desgaste, gasto de agua adicional hasta conseguir la temperatura apropiada y dificultades para proporcionar agua caliente en varios puntos de forma simultánea.
Su funcionamiento es el siguiente: el agua se acumula en un depósito aislado que mantiene el agua caliente, lista para poderse usar cuando se desee. Existen dos tipos: los que están compuestos de caldera más acumulador y los termoacumuladores de resistencia eléctrica. La ventaja de los sistemas acumuladores es que se consigue, de forma instantánea, la temperatura deseada y permiten el uso de agua caliente en dos puntos del hogar. Sin embargo, presentan el hándicap de su alto consumo, especialmente los termoacumuladores.
-Descubre: Agua Caliente Sanitaria: Tipos y características de las instalaciones ACS-
La temperatura del agua es un factor fundamental en un sistema de ACS para lograr una óptima experiencia en el usuario e, incluso, evitar quemaduras si el agua está demasiado caliente.
La temperatura ideal del agua en los sistemas instantáneos de calentamiento es de entre 40 y 50ºC, mientras que en los acumuladores es algo mayor: entre 55 y 60 º C. La diferencia de temperatura se explica porque en los acumuladores la temperatura de agua debe mantenerse durante un tiempo, lo que provoca que baje y, en el momento de llegar al usuario, se encuentre en el rango idóneo: 40-50ºC.
Con el objeto de disponer, lo más rápidamente posible, de la temperatura del agua idónea, es importante que el sistema de agua caliente sanitaria que instalemos en nuestro hogar disponga de retorno. Es decir, que incluya una tubería que parta desde el suministro más alejado y vuelva al acumulador o caldera.
Disponer de ACS a la temperatura ideal siempre que los necesitemos no está reñido con un gasto energético moderado. Pero para ello debemos tener en cuenta los siguientes consejos de eficiencia energética.
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La principal e indispensable característica de las válvulas y accesorios para instalaciones de ACS es que puedan trabajar a altas temperaturas. En definitiva, las soluciones de dispositivos para agua caliente sanitaria deben poder funcionar de forma óptima al menos hasta 95ºC.
Los elementos más comunes son:
En definitiva, las válvulas o llaves para los sistemas de agua caliente sanitaria son muy similares a las instalaciones de agua fría. La principal diferencia, como hemos comentado, es su capacidad para soportar y poder funcionar de manera eficiente en altas temperaturas.
En Válvulas Arco, fabricamos diferentes tipos de válvulas para adecuarse a las características concretas y específicas de cada instalación. Garantizamos el mejor rendimiento, puesto que nuestros accesorios y válvulas están fabricados en latón europeo, polímeros y elastómero de primera calidad, que aseguran la estanqueidad y el buen funcionamiento en un amplio rango de condiciones de servicio.
Válvulas Arco no solo dispone de válvulas y accesorios para ACS, trabajamos en otras áreas. En nuestro catálogo podrás encontrar, por ejemplo, las válvulas de esfera Tajo 2000 Solar, especialmente diseñadas para trabajar en instalaciones solares térmicas o sistemas de calefacción centralizada. Las características técnicas (materiales y tecnología aplicada) de estas válvulas permiten un funcionamiento perfecto y continuo en altas temperaturas. Esto se debe, principalmente, a los materiales con la que está fabricada y a la tecnología aplicada.
Otro ejemplo de solución Arco son sus modelos con sistema antical, destacan sus modelos A·80 Mac con sistema de eje de bola antical (VITAQ), que destacan por su resistencia a los problemas que genera la cal y su comodidad de uso, puesto que se acciona mediante una maniobra de cuarto de vuelta. Está fabricada en latón europeo, su estanqueidad se asegura mediante elastómero de primera calidad.