Calefacción
Calefacción
Una vivienda interactúa constantemente con su entorno desde el punto de vista energético. Todo el día, todos los días. Intercambia calor, lo cede o lo acumula, según las condiciones exteriores e interiores de la vivienda.
¿Qué vamos a ver en este post?
A la hora de instalar una calefacción en una vivienda debemos tener en cuenta estos factores: su forma, volumen, orientación, situación geográfica, distribución de espacios, materiales utilizados en la construcción, color de la fachada, o tipo de aislamiento aplicado. La combinación de todos esos factores es decisiva para calcular las necesidades de consumo energético para calentar una vivienda.
En este artículo vamos a centrarnos en los componentes de una calefacción para vivienda con un sistema de caldera. Aunque también son posibles, y muy comunes, los sistemas con radiadores eléctricos, que serán motivo de otro artículo, como también la aerotermia.
Los componentes de una instalación de calefacción para una vivienda, sea cual sea su tamaño serán:
Las fuentes de energía empleadas hoy son múltiples, desde el gas natural, el gas propano, el gasoil, o el pellet, cada vez más en boga por su sostenibilidad.
La caldera doméstica es un elemento esencial, se encarga de calentar el agua para distribuirla a lo largo del sistema.
Tiene una entrada de agua fría, que llega desde los radiadores, para que sea calentada y distribuida de nuevo.
A todo ello se añaden unos sensores que detectan el flujo de agua, controlan la bomba que deja entrar el líquido, y se complementan con unos sensores de temperatura que evitan el sobrecalentamiento principalmente.
Actualmente las calderas de uso doméstico para calefacción y ACS han evolucionado hacia calderas de condensación mucho más eficientes energéticamente ya que aprovechan su propia combustión para ahorrar energía.
Lo compone todo el sistema de tubos que instalaremos a lo largo de la vivienda, dando servicio a cada uno de los radiadores.
Para la distribución del agua caliente existen dos tipos de instalaciones: la calefacción monotubo y la calefacción bitubo. En ellas entraremos en detalle más adelante.
Los radiadores son los elementos emisores de calor. Constan de diversos módulos; a más módulos mayor será la capacidad de generar calor, por lo tanto a estancias con más metros cuadrados a calentar, se necesita radiadores más grandes (con más módulos).
Los radiadores tienen una entrada con una llave de corte y una de salida, donde se pone un detentor para regular el flujo de agua y equilibrar la instalación manteniendo un poder calorífico constante en cada radiador, permitiendo un nivel de confort similar en cada estancia.
Aunque la llave o válvula y el detentor sirven para dejar pasar el agua, la función es diferente. Si un dormitorio alcanza la temperatura muy pronto y no tiene una válvula con termostato, los habitantes de la vivienda pasarán calor, por lo que se regula manualmente cerrando la llave.
Existen también las llaves termostáticas de calefacción que permiten pre-fijar en algunos radiadores la temperatura deseada, y son de uso obligatorio en dormitorios y salón principal.
Normalmente la emisión de calor de las calderas se controla mediante un termostato de ambiente. También existen algunos modelos de termostato electrónico, y por lo tanto programable, que hace esta función, activando el paso del agua según la hora y temperatura que el usuario le indique.
-Lectura recomendada: Normativa de instalación de gas natural para viviendas-
Dentro de los componentes de instalación de la calefacción de una vivienda existen dos opciones si tomamos como referencia el tipo de circuito de tubos a instalar: la calefacción monotubo y la calefacción bitubo.
La instalación de calefacción monotubo, se realiza mediante un solo tubo que a su vez lleva la entrada de agua y el retorno.
Con este sistema, el agua caliente sale de la caldera y recorre cada radiador secuencialmente. Esto supone que el radiador acaba teniendo una temperatura distinta, y al último radiador del circuito le cuesta más alcanzar la temperatura deseada.
La calefacción monotubo tiene varias ventajas, como son:
Pero la calefacción monotubo también tiene sus desventajas, a saber:
Como conclusión. La calefacción monotubo se recomienda para circuitos o viviendas pequeñas, en las que la distancia entre el primer y el último radiador sea la menor posible, así el recorrido del agua caliente es menor, y de esta manera se logra que la pérdida de calor sea mínima.
La calefacción bitubo es la más común entre los instaladores. En este tipo de instalación el agua caliente circula por todos los radiadores a través de un tubo y retorna el agua de menor temperatura a través de otro tubo paralelo. Todos los radiadores alcanzan la misma temperatura simultáneamente por lo que es una calefacción con mayor equilibrio y que no genera desajustes en la sensación térmica entre estancias de la vivienda.
Ventas de la calefacción bitubo:
Desventajas de la calefacción bitubo:
El bitubo convencional tiene un tubo de ida y otro de retorno que recorren toda la vivienda, radiador por radiador. El tubo de ida alimenta a todos los radiadores secuencialmente y el de retorno recoge el agua de todos los radiadores también secuencialmente.
Así, el tubo de retorno hace recorrido inverso al de ida, o sea que el primer radiador en recibir el agua es el último en cambiarla. Eso contribuye a mantener una temperatura estable en todas las estancias.
-Quizá te interese: Instalaciones bitubo y monotubo - Ventajas e Inconvenientes-
Existen en el mercado diferentes soluciones a modo de kit de instalación de calefacción para viviendas que comprenden todos los elementos necesarios, desde la caldera, los tubos y los módulos de radiadores, con sus llaves y detentores necesarios en función de los metros cuadrados de la vivienda, además del resto de elementos necesarios para la instalación.
Estos kits de calefacción están pensados para instalaciones en pisos o viviendas unifamiliares, y me están preparados tanto para sistemas monotubo como bitubo. En Válvulas Arco contamos con kits especiales con todos los accesorios necesarios para una correcta instalación: válvulas manuales o válvulas termostáticas o termostatizables, accesorios de conexión, detentor, cabeza termostática, entre otras cosas. Contar con componentes de calidad se aseguran las instalaciones de calefacción en las viviendas.